LA MIRADA EN CRISTO

Cuando Dios pasa por nuestras vidas, las cosas no pueden ser igual, las cosas no puden permanecer igual, nada a nuestro alrededor puede seguir igual, yo estoy segura que Dios es un Dios de cambios. Y de cambios drasticos. Tanto asi que dice que morimos a nuestra vieja naturaleza y nace nuestra nueva naturaleza, tenemos vida nueva, nacemos de nuevo. El nacer de nuevo es un cambio de vida, representa no volver a hacer cosas que haciamos antes y hacer cosas mejores, cosas nuevas, vivir una vida guiada por el Esperitu Santo. Vida nueva, renovada en el Espitiru Santo.

El hombre le pide a Dios caminar sobre las aguas, pero no es por sensacionalismo. Dios solo quiere que seamos humildes, y sencillos, pequeños. El mar, son las dificultades de la vida en ese mar se deben poner los ojos fijamente en Dios, y caminar, no estancarse.

A veces participamos a Dios de las cosas, le hacemos saber pero no se le invita a ser parte de los eventos. No se le invita no se le involucra en las situaciones. Por ejemplo, muchos le pedimos un esposo/a que le ame, y cuando nos casamos, vamos a la casa de Dios y le damos gracias por ese esposo y le participamos de nuestro matrimonio, pero no le invitamos a ser parte de ese matrimonio, no le invitamos a involucrarse en ese matrimonio. Y solamente tenemos un Dios utilizado, pero cuando lo invitamos a ser participe el confirmara lo que es, lo que es permanece y lo que no es de Dios y en El, se acaba.

Este es un llamado para que nunca se nos olvide meterlo a el, dejarlo participar, involucrarlo en todo lo que hacemos, y que el sea parte de todo y en todo. Si Dios se involucra el redime.

Si Dios se involucra y lo tenemos a El, el puede hacer en nosotros. Y así nosotros podremos estar por encima de todas las dificultades, podremos estar encima de esas aguas aferrándonos a El.

Debemos aferrarnos a Dios en el abandono, el silencio, el discernimiento del momento y después poner manos a la obra, caminar. Haciendo en silencio, con fe, esperanza y confianza en Dios. Que aunque no sabemos lo que esta pasando sabemos que Dios esta actuando.

Debemos de no mirarnos a nosotros mismos, siempre ver y poner la mirada en Dios, cuando pedro se vio a si mismo fue cuando empezó a caer, siempre poner la mirada en Dios, abandonando. Solo Confiando en el Confiable puedo llevarnos a grandes alturas, experimentar de su poder.

Nosotros no podemos solos pero somos un medio de comunicación de la gracia de Dios y así se cumplirá en nosotros Marcos 16; 17 “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echaran fuera demonios, hablaran nuevas lenguas, tomaran en las manos serpientes y si bebieren cosa mortífera no les hará daño, sobre los enfermos impondrán sus manos y sanaran” sin quitar los ojos y la mirada en Dios.

Colocando los ojos siempre en el señor, el sentido mas importante el de la vista. Se concentra la mirada en Dios de allí pasa a la mente, y de la mente al corazón, todo el ser se concentra en Dios.

Es importante no mirar las circunstancias, no mirar lo que nos rodea, no mirar las grandes olas de la tormenta pero ver a Dios. Ver como en medio de todo lo malo Dios esta actuando, esta formando nuestro caracter, esta acrecentando nuestra fe, esta afirmando nuestros pasos y nos esta acercando mas a El.

Es importante dejar de ver a la tormenta y ver a Dios atravez de la tormenta. Descansar confiados en Cristo Jesus en que el esta siempre con nosotros, sin importar cuan grande es la marea.
Marcos 4: 35-41