MUJER PROVERBIOS 31



DISFRUTA HOY DEL TERCER PRINCIPIO DE LA MUJER PROVERBIOS 31, CON WENDY BELLO

El capítulo 31 del libro de Proverbios fue escrito por un hombre, pero inspirado por una mujer a quien muchas conocemos como “la mujer virtuosa”. Por años a mí me resultó difícil aceptar a esta mujer porque me parecía demasiado perfecta. Todo lo que se decía de ella era bueno, en su casa todo estaba en orden, tenía hijos que nunca se portaban mal, jamás discutía con su esposo y encima de todo era una empresaria exitosa. Con el tiempo he llegado a entender que estamos viendo solo el capítulo final del libro de esta tremenda mujer. Los otros capítulos, donde estuvieron sus luchas, sus dudas, sus incertidumbres, su llanto, quedaron atrás y no son tan importantes porque el resultado final los opacó. Tenemos mucho que aprender de su vida y por eso estamos estudiando siete principios que la caracterizaron.
Esta semana nos concentraremos en el tercer principio, el de la maternidad:




Cuida a sus hijos y considera la maternidad como un gran llamado, dirigido a moldear a quienes un día conformarán y guiarán los destinos de las naciones.
1. La maternidad es cuidar: Esto se traduce de muchas maneras. Cuidar es alimentar, vestir, estar al tanto de las necesidades (v. 15, 21, 22). Sé que es una tarea agotadora, muchas veces parece interminable, pero es parte del rol que viene con el título de mamá.
2. La maternidad es un gran llamado: Ser mamá es un privilegio que Dios nos da, es un llamado que hace a nuestras vidas y como tal, espera que lo cumplamos. Hemos sido designadas para esa función. Es un llamado que implica entrega total, renunciar al “yo” para invertirnos en esa vida o vidas que Dios pone en nuestras manos. Es una función de 24 horas que no tiene vacaciones, ni días feriados.
3. La maternidad tiene la mira en el futuro: La mamá de Proverbios 31 comprendió que su llamado tenía la mira puesta en el futuro, en la formación de hombres y mujeres de Dios que un día serían protagonistas en la historia del mundo. Tenemos una gran responsabilidad. Lo que hagamos en nuestro presente como mamás determinará el futuro de la nación en que vivamos. Dios nos llama a instruir con amor (v.26), a hablar con sabiduría (v.26) para moldear a esos hijos, para garantizar un buen futuro.

Si me preguntaran cuál ha sido hasta ahora el mayor desafío de mi vida, diría sin pensar: “¡Ser mamá!”. Ser mamás es una profesión que se aprende con la práctica. No hay conferencia ni libro que pueda prepararnos lo suficiente. Tendremos dudas, derramaremos lágrimas, y hasta nos equivocaremos. Yo estoy segura que a la mujer virtuosa todo esto le pasó. Sin embargo, Dios nos ha llamado, nos escogió para la tarea y se encargará de darnos la fuerza y la sabiduría necesarias si así se lo pedimos. Estoy igual de segura que ese fue el secreto de esta admirada mujer a quien sus hijos llamaron “bienaventurada”.

RETO DE HOY
Cuando la tarea de ser mamá te abrume, recuerda que es un llamado de Dios y él te capacitará para cumplirlo.

WendyBello © derechosreservados

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Abrazos;

Judith!








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