Y en esta
etapa de mi vida puedo pensar en todo lo que no logre hacer, y de pronto
acelerar el paso y tratar de hacerlo ahora.
O puedo ver
el camino que me queda por recorrer con Dios.
Hoy quiero
pensar que aunque no tengo la fuerza de una joven de 20, tengo la sabiduría de
Dios, que no tenía entonces. Que aunque no soy tan irresponsable aun puedo
arriesgarme en la vida, que aunque no le serví a Dios en mi juventud, aun puedo
darle a Dios lo mejor de mí.
Digo que es
lo mejor porque hoy me siento más cerca de Dios que nunca, hoy me siento viva
como nunca antes, ahora aprecio lo que antes era normal, he aprendido a estar
agradecida con Dios y con la vida por cada día que nos regala.
Y aunque
las luchas y las pruebas no terminan, hoy se, que tengo un Dios que está vivo,
y que nunca me abandona. Un Dios que me ama tanto como para regalarme un dia
mas de vida, y un año mas.
Gracias por escuchar nuestro minuto de animo:Escucha aqui nuestro progrma
Judith H.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario