PERFECCIONISTA

En alguna época de mi vida, mi esposo y mi familia comenzaron a decir que era una mujer perfeccionista. Pero hoy me pregunto ¿realmente existirá ese termino para definir a alguien?

Era perfeccionista por que quería que todas las cosas salieran tal como las planeaba desde un principio, no había cabida para ningún margen de misericordia en mis planes, y si las cosas no salían como yo quería me enojaba, me desesperaba y eso podría arruinar mi día, y hasta mi semana. Quería que todo fuera “perfecto”.

Mi definición de perfecto en ese momento era: regirse a un plan, línea a línea y paso a paso. Pero que diferente es mi opinión de perfección hoy!

Hoy puedo definir perfección con una sola palabra JESUS. La verdad es que nosotros siempre seremos imperfectos y nuestras cosas siempre serán imperfectas. Ahora, un plan era perfecto para mí, desde mi punto de vista, pero ¿que pensarían los demás? ¿Que pensaría Dios?

La Biblia dice que Dios trabaja con nosotros hasta llegar a su plan perfecto. De pronto el perfecto plan de Dios no es el mismo que tú piensas “seria perfecto”. Muchos hemos basado nuestras vidas en alcanzar la perfección de la que nos habla el mundo.

Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá
*perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús. Filipenses 1:6

Un partido perfecto para una jovencita, seria un muchacho que va a la iglesia, que ha estudiado, y gloria a Dios si tiene un buen trabajo.

Pero que tal que para Dios, el partido perfecto para esa jovencita sea, un muchacho, que no haya podido estudiar, que viva sin su familia y que ni siquiera tenga un trabajo, pero tenga una gran fe y un gran corazón. Eso no seria perfecto a nuestros ojos pero y si Dios quiere mostrarle como el se glorifica en esa vida y mostrarnos como el puede hacer en alguien una maravillosa obra, una obra perfecta!

Finalmente llego a la conclusión que no existe la perfección, y cuando somos mas débiles Jesucristo se glorifica en nosotros, y si le entregamos a el nuestras imperfecciones, el que comenzó la obra en nosotros la perfeccionara día a día, hasta que Jesucristo venga.

RETO DE HOY

Atrevete a poner tus imperfecciones en las manos del que perfecciona sus obras. Jesus de Nazareth.

Judith!